El hurón (Mustela putorius furo) pertenece a la familia de los mustélidos,
subespecie doméstica del turón (Mustela putorius). El nombre "turón" proviene del portugués "touro", que significa toro, y hace referencia a la furia de estos animales. Y "hurón" es una derivación de este nombre. Es un familiar cercano de la comadreja (Mustela nivalis) y del armiño (Mustela erminea), con los que comparte algunas características.
Son animales largos, de unos 45-65 cm en la edad adulta, con patas cortas. Su peso ronda de los 500 gramos hasta 2000 gramos. Los machos son más grandes que las hembras. Su pelaje es variado, de pardo a color crema con zomas blancas, las patas y la cola son oscuras, y en la cara parece llevar un antifaz oscuro. Tiene 34 dientes (como dicen en este anuncio de Movistar...). Su cabeza es pequeña, ancha y corta. Cabe destacar su forma particular de caminar, con la espalda arqueada, de forma que pudiera parecer que tiene joroba.
Poseen, como otros mustélidos, glándulas odoríferas junto al ano, con el que expulsan una sustancia olorosa (de ahí el nombre de "putorius", que singnifica pútrido, en referencia al olor). Estas
glándulas son usadas para marcar el territorio y, al igual que las comadrejas o los armiños, puede
usarlas cuando se excita o asusta, aunque en menor medida que las mofetas y desaparece
rápidamente. También tiene la función de lubricar sus deposiciones.
Los hurones suelen pasar mucho tiempo durmiendo (14-18h por
día), pero el resto del tiempo son muy activos y juguetones. Son animales
crepusculares, esto quiere decir que son más activos en el amanecer, atardecer
y parte de la noche. Deben salir al menos una hora diaria para que exploren y
hagan ejercicio. Son animales muy curiosos y poco temerosos así que no dudes en
enseñarle lugares y objetos nuevos.
Foto: http://www.answersingenesis.org
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